Vuelos baratos a Argelia

Descubre Argelia

Casi dos millones y medio de Km2 de inhóspito desierto, convierten a Argelia en un destino para amantes de lo imprevisible. Antes, durante y después del viaje, conviene siempre tener en cuenta que Argelia es un país árabe de fuerte influencia francesa, que ha pasado por momentos difíciles en la década pasada y al que actualmente no es fácil acceder. Desde el Sahara hasta las costas del Mediterráneo, el país es todo un desafío.

Para los más osados, recomendamos empezar por su gran sur. Entre arenas doradas se encuentra la enigmática ciudad roja de Tamanrasset, puerta de acceso para el comercio procedente del norte, que tiene por destino el curso navegable del río Níger. De vuelta a la costa mediterránea, camino de Túnez, nos cruzaremos con los impresionantes paisajes de Cabilia y Ares (la tierra de los bereberes), continuación de los montes Atlas, un lugar escarpado que desciende hasta el mar por el norte y que busca el desierto tunecino hacia el este, ¡disfruta de la belleza de sus paisajes y la hospitalidad bereber!

De vuelta a la “civilización”, Constantine, Orán y Argel (su capital). La primera situada al este, parece como colgada de las gargantas del río Rummel, donde la sitúo el emperador Constantino hace 2000 años. Orán, es la segunda ciudad del país y la de mayor influencia española, tres siglos de ocupación dejan edificios de arquitectura hispano-árabe muy reseñables. Por último, Argel, la aglomeración urbana más importante, es una de la ciudades más bellas del mundo árabe, a pesar de que la colonización destruyó gran parte de su legado arquitectónico, todavía conserva un elegante paseo marítimo y su laberíntica kasba (casco antiguo).

Para terminar, no abandones este magnífico aunque desconocido país sin probar alguno de sus manjares: pescados a la brasa, “chorba” (sopa de verdura), cuscús, tajín o sus famosos pinchos de cordero dulce y ternera.

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